terça-feira, 1 de dezembro de 2009

MT 2 - 1 a 12 Jesús nació en Belén de Judea, y los corazones de todos los que adoren en espíritu y en verdad.

MT 2 - 1 a 12 Jesús nació en Belén de Judea, y los corazones de todos los que adoren en espíritu y en verdad.



MT 2-1 E, que Jesús nació en Belén de Judea en días del rey Herodes, he aquí, los hombres sabios del oriente a Jerusalén,
MT 2-2 diciendo: ¿Dónde está el nacido rey de los Judios? Hemos visto su estrella en el oriente, y venimos a adorarle.
MT 2 - 3 y el rey Herodes oyó esto, alterarlo, y toda Jerusalén con él.
MT 2 a 4 y se reunieron todos los principales sacerdotes y los escribas del pueblo, les preguntó dónde nacer el Cristo.
MT 2 a 5 y le dijeron a él, en Belén de Judea: porque así está escrito por el profeta; MT 2 - 6 y tú, Belén, tierra de Judá, de ninguna manera por lo menos entre los príncipes de Jerusalén, de ti saldrá un guía, que deberá alimentar a mi pueblo Israel.
MT 2 a 7 Entonces Herodes llamó a los magos, indagó de ellos sobre el momento exacto apareció la estrella.
MT 2 a 8 y enviándolos a Belén, dijo: Id allá y diligencia por el niño, y cuando lo encuentren, avísenme, que yo también vaya y de culto.
MT 2 a 9 y, habiendo oído al rey, se fueron, y he aquí la estrella que habían visto en el oriente iba delante de ellos, hasta que llegando, se detuvo sobre donde estaba el niño.
MT 2-10 y ver la estrella, se regocijaron con muy grande gozo.
MT 2 a 11 E, entrando en la casa, vieron al niño con María su madre, y postrándose, lo adoraron a él y abriendo sus tesoros, le ofrecieron presentes: oro, incienso y mirra.
MT 2-12 y, siendo avisados por revelación en sueños para volver a Herodes, regresaron a su país por otro camino.



Jesús nació en Belén de Judea, la ciudad fue nombrada así para distinguir la ciudad de Belén de Galilea, desde Belén de Judea, es la ciudad donde el rey David nació durante el reinado del rey Herodes, también conocido como Herod the Great, un rey extremadamente cruel y sanguinario, que ordenó el asesinato de tres niños, varias esposas. Herodes no era judío, o se edomita edomita, un descendiente de Esaú, fue nombrado gobernador de Judea por el Senado de Roma y apoyado por el general Marco Antonio. La palabra de Dios dice que Jesús nació en Belén, la ciudad del rey David. La fecha en que Jesús nació no se sabe con certeza, pero tener a Jesús nació en Belén de Judea, había unos magos vinieron del oriente a Jerusalén, guiados por una estrella. Los Reyes Magos no conocía las Escrituras y en algún momento apartó la mirada de la estrella y terminó en Jerusalén, cuando deberían estar en Belén de Judea. Al leer y ver la palabra de Dios o no siguen la orientación del Espíritu Santo de Dios, en vez de tener un encuentro con Jesús, tenemos una reunión con Herodes, y todos aquellos que quieren destruir nuestra fe, o matar al niño JESÚS, que a menudo se acaba de nacer en nuestros corazones. La palabra de Dios no dice que los Reyes Magos eran reyes y no dice su nombre, porque el Señor no hace acepción de personas, a Dios, cuando aceptamos a Jesús como Señor y el único salvador que se conoce como siervos y siervas de Dios. La palabra de Dios no dice si eran dos, tres o más sabios, porque el Señor no se refiere a la cantidad de gente que el amor, en verdad el Señor de los verdaderos adoradores que le adoren en espíritu y en verdad. Jesucristo es la cabeza de la iglesia, los Magos representan a todas las personas que están fuera de la obra de Dios, que no forma parte del nuevo pueblo de Dios, sino que van a la iglesia con un corazón roto, dispuesto a tener un encuentro real y fiel a Jesús, el deseo de conocer, buscar y adorar a Dios en espíritu y en verdad. En Jerusalén, los Reyes Magos le preguntó: ¿Dónde está el nacido rey de los Judios. El rey Herodes oyó esto perturbe, y toda Jerusalén con él. Cuando Jesús Cristo nace en nuestros corazones cuando realmente llega a nuestras vidas, son acosados, a todos aquellos que no alabar y glorificar el nombre del Señor, porque ahora tienen la certeza de que se llama el Rey y Señor de nuestras vidas JESUCRISTO. La palabra de Dios dice que el Señor nos ha hecho también pueden ser ministros del Nuevo Testamento, no la letra, sino del Espíritu: porque la letra mata, el espíritu vivifica. Los príncipes, los sacerdotes y los escribas conocían la palabra de Dios en la letra, como un libro de historia o geografía, y le dijo a Herodes que se había proyectado que el niño Jesús nació en Belén de Judea, pero como no tenían la revelación dada por el Espíritu Santo de Dios, no me di cuenta el momento de su vida, no se dio cuenta del momento en que tanto esperaba, no se dio cuenta de que el niño Jesús acababa de nacer. Cuando leemos la palabra de Dios, debemos orar y pedirle a Dios que nos dé su revelación, habla con nosotros a través de su Espíritu Santo y nos da su dirección. Herodes le dijo a los Reyes Magos, Go y buscar diligentemente para el niño, y cuando lo encuentren, avísenme, que yo también vaya y de culto. La palabra de Dios dice, "Sin fe es imposible agradar a Dios, porque es necesario que quien se acerca a Dios ha de creer que existe y que recompensa a los que buscan con ahínco. Pero no es el Herodes de hoy, que cuando se le pidió a la iglesia, que buscan al Señor y actuar: con diligencia, sutilmente, con cuidado, para que usted piense que su intención es adorar al Señor Jesús, pero su verdadera intención es enfriar su fe y sacarlo permanentemente de la presencia del Señor. Los sabios oído al rey, y la izquierda, pero siguieron la estrella que siempre estaba delante de ellos. El Espíritu Santo de Dios está siempre delante de nosotros, que nos guíe, nos guíe para que no nos desviaremos del camino que conduce a la salvación y vida eterna en Cristo Jesús. Pero muchas veces salimos del camino, vamos a llevar por nuestra razón, perdemos nuestro camino cuando tenemos que tomar una decisión y sólo se preocupan de lo que siente o piensa, y no se preocupan por lo que Dios piensa o cree de decisión que tomamos o de la decisión que estamos a punto de tomar. La estrella se detuvo en el lugar que estaba el niño. La estrella representa al Espíritu Santo de Dios. La palabra de Dios, refiriéndose a Jesús dice: El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque el Señor me ha ungido para predicar las buenas nuevas hasta los mansos, me envió a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos y la apertura detenidos de la prisión. Si usted es un siervo sincero y fiel al Señor, sabemos que Jesús está presente en su corazón, en tu vida y el Espíritu de Dios es también acerca de usted. La estrella se detuvo en el lugar que el niño Jesús, que no habían visto al niño y se regocijaron con muy grande gozo. Jesús vendrá a buscar su iglesia de Jesús, no hemos visto, pero sólo a aceptar en nuestros corazones vivimos momentos de gran alegría. El Señor Jesús dejó una palabra maravillosa a su iglesia, que no han visto a Jesús presente físicamente, sino por la fe creyó y dijo: Bendito (Beato) que no han visto y han creído. Cuando Jesús está presente en nuestras vidas, podemos estar parados, podemos ser pacientes, nos puede estar pasando a través de luchas y dificultades, pero el Espíritu Santo nos consuela, nos reconforta y hasta en los momentos de estos eventos en nuestras vidas nos sentimos una gran alegría, para Estamos seguros de que con el tiempo el Señor extenderá su mano de poder y nos bendiga. Los Reyes Magos no eran parte del pueblo de Dios, pero ante los peligros del desierto, viajan miles de kilómetros, no escatimó esfuerzos para adorar a la que acababa de nacer en Belén de Judea, y en sus corazones. A menudo estamos cerca de la iglesia, ir a la casa del Señor para adorarlo. Jesucristo es la cabeza de la iglesia. Los Reyes Magos ofrecieron a Jesús cuando vieron lo que era mejor, más preciosa, y abriendo sus tesoros y le ofreció, oro, incienso y mirra. El siervo fiel va a la iglesia con un corazón con el corazón abierto, con el corazón al Señor Jesús, y ofrece lo que tiene que mejor, más valioso, que da todo su corazón. Los magos fueron advertidos por revelación divina, no en un sueño de volver a Herodes, se marcharon por otro camino. El siervo del Señor, cuando usted acepta al Señor Jesús en espíritu y en verdad, está dirigido por el Espíritu Santo de Dios y llegar a recorrer el mismo camino de Herodes en el camino y no la alabanza o glorificar el nombre de Dios, porque ahora tiene el de su bandera de la salvación y de vida eterna en Cristo Jesús. Y su canción de la victoria es Maranata VEN SEÑOR JESÚS!

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